En la actualidad nosotras educadoras de estas nuevas generaciones procuramos brindas a cada estudiante un crecimiento personal donde tanto sus emociones como el crecimiento espiritual se aborden para mejorar a diario como personas únicas y valiosas.
En enseñamos con amor para lograr crear un ambiente de confianza y seguridad, armonía y paz donde los niños logren relacionarse con buena actitud y transmitiendo energía positiva en el aprendizaje.
con el ejemplo y las acciones diarias enfrentamos el reto de sensibilizar a amar a Dios y la vida que nos ofrece.
Logrando que los niños vivencien la esperanza, como la puerta que les permita lograr con amor cambios en la sociedad en que se van a desenvolver. La fe no debe dejar de sentirse ya que es lo que nos permite, soñar, vivir y alcanzar metas.
Julia Marín y Kattya Roses Sion Turrialba. 2022